martes, 9 de marzo de 2010

Coaching; modelo para un liderazgo humano.

Recuerdo que en mis años de estudios, tanto colegiales como universitarios, los profesores y todos aquellos que nos motivaban a seguir adelante y ser mejores implícitamente nos transmitían el sentido de la competencia en los mejores términos del darwinismo social, todos con buenas intenciones claro está. Con igual intriga recuerdo en los tiempos escolares, ¡aún más atrás!, la estimulación a ser el mejor de la clase en términos académicos y obtener el máximo premio de estar en el cuadro de honor. Todo ello basado en una valoración cuantitativa y muy pobre en valores de convivencia social. De ahí empezábamos a notar y vivenciar los primeros círculos sociales y los odiosos incipientes procesos de exclusión social. Tal ves recordemos la estructura de muchos colegios; 10 primeros años y dos quintos años.

Pasado el tiempo, y ya en la carrera competitiva para la que nos habíamos formado empecé a descubrir que profesionales con buenos grados académicos y con un alto espíritu competitivo se encontraban frustrados y además les pesaba mucho la presión y el estrés del liderar, gerenciar o gestionar a otras personas. Y de igual manera colaboradores con pobres competencias en la resolución de conflictos, problemas con la figura de autoridad, creencias limitadoras sobre la motivación y el trabajo y con pocas habilidades humanas en la atención del cliente.

Frente a tal situación descubrí que usualmente tomaban una de tres opciones a) Caer en cuenta que las relaciones humanas en el ámbito laboral son muy difíciles y complejas y que por lo tanto había que desconfiar siempre de las cualidades de los demás, b) Que no se sentían competentes en sus habilidades sociales para dichos puestos pero que tenían que hacerlo y c) Que “no quedaba de otra” y había que aplicar la “ley de la selva” y “sobrevivir a como se pudiera”, con las consecuencias que esto implica en las relaciones laborales.

Profesionales con amplios conocimientos pero con pobres competencias en las habilidades humanas. Inclusive me he encontrado con algunos que dentro de sus creencias todavía prevalecen ideas relacionadas con la administración al mejor estilo Taylorista y de liderazgo tradicional. Con las correspondientes consecuencias y efectos en sus formas de gestionar, en sus tomas de decisiones y principalmente en la solución de los conflictos y problemas en las relaciones laborales y el trabajo de equipo.

En seminarios y conferencias me he dado cuenta que muchos y muchas se sienten atraídas por nuevas formas de gestionar las diferentes competencias de sus colaboradores pero que no se atreven a llevarlo a cabo en su máximo potencial pues no se sienten con las habilidades para hacerlo. O en el peor de los casos les parece muy útil si fuesen “otros” quienes tuvieran la información y no ellos, no reconociendo así que sus propios cambios también contribuirían de una forma muy eficaz a lo que de igual manera desean.

El Coaching se ha convertido en una metodología que nos permite maximizar el aprendizaje de habilidades humanas para mejorar la capacidad de gestión que tiene un líder. En Coaching hemos descubierto que no solo basta saber la información sino practicar y recibir realimentación sobre nuestros propios actos. El Coaching se convierte así en una forma de entrenamiento (proceso de aprendizaje) personal que le permite a los individuos mejorar sus formas de percibir, responder e interactuar en el ámbito laboral y organizacional.

Trabajar es básicamente hablar, dialogar o conversar con otros; tenemos reuniones, planificamos, elaboramos informes, leemos y escribimos correos electrónicos etc. De tal manera que construimos una red social, una red que dialoga sobre sus propia cotidianidad laboral. En ese diálogo participan las creencias (juicios o modelos mentales) que tengamos; tanto sobre la misión, visión o valores de la organización así como todas aquellas producto de las relaciones laborales y de nuestras experiencias personales; estudios, vivencias previas, cultura, entre otros. De igual manera participan nuestras emociones y las formas en que las percibimos en esa red social. Y por supuestos nuestros actos que hablan de quien soy como persona y como profesional y como estos influyen y se permiten influir por los actos de los demás.

Esto implica habilidades de interacción y comunicación que sean efectivas. De igual manera, nos demandan que nuestros actos y emociones estén guiados por un perfil claro y adecuado de las creencias que poseo (concientes o no) pues son éstas las que me dan el modelo de cómo y hacia donde proceder. Es usual que las personas no pensemos en el poder de nuestras propias creencias y percepciones de mundo pero son las que nos dicen como enfrentar las situaciones que se nos presentan y así si terminamos siendo efectivos o no.

A manera de ejemplo suelo señalar en mis seminarios que tanto los jefes como los colaboradores muchas veces salen de las reuniones de trabajo con la expresión de ¡siempre lo mismo! Unos dicen (los colaboradores) “¡no sé porque nos hacen perder el tiempo si no dicen casi nada nuevo!” y otros (los jefes) “! No entiendo porque hay que estar repitiéndoles cada vez!”. Todos frustrados y desmotivados y con un acuerdo tácito de no resolver la situación. El resultado; no fuimos efectivos en nuestra comunicación – interacción, derivando pérdida de tiempo, energía y dinero.

¿Es posible construir un modelo y procesos de comunicación – interacción diferente para poder lograr mayor efectividad en las respuestas y compromisos de los colaboradores y jefaturas? Sí, si es posible obtener un coaching (entrenamiento) que nos lleve a mejorar nuestros modelos de realidad y así nos permita optimizar el potencial tanto de gestores como de colaboradores. Adaptarnos a nuevas necesidades con menos resistencia al cambio, mejorar el desempeño y así la contribución y por supuesto tener un conjunto de creencias sintonizadas no solo con sus propios deseos de superación sino también con los de la organización.

Estas habilidades en comunicación, liderazgo, solución efectiva de problemas, relaciones contributivas y un diálogo generativo de nuevas posibilidades no fueron parte ni de las creencias ni las prácticas que recibimos en nuestra educación formal. Muy por el contrario fueron parte de un conocimiento y esfuerzo desarrollado, y muchos casos no bien logrado, en el ámbito de nuestras experiencias informales y que después nos serían demandadas en nuestras relaciones laborales formales.

Ser competitivo no implica dejar de ser colaborador y dispuesto a involucrarme en el desarrollo que mi red social laboral está inmersa. De ahí que es importante que pueda sintonizar mis creencias con las de los demás y la organización. De tal manera que no solo sea uno el ganador o unos pocos “los de cuadro de honor”, sino percibir el potencial y permitir el fluir del mismo para todos y todas. Ser parte y aportar mi parte se convertirá en la sinergia del éxito.

Es posible cambiar el modelo mental por el cual creemos que solo son unos cuantos los “mejores”, “importantes” o “exitosos” para empezar a tener un modelo que nos permita percibir el amplio potencial y competencias posibles entre todos y que éste nos lleve a percibir nuestra realización no sólo como personas, sino también como equipos, organizaciones, empresas y sociedades exitosas y con calidad humana.

Imagenes con fines ilustrativos no propiedad del autor.  El blog tiene por finalidad ser utilizado como herramienta de aprendizaje a distancia en la docencia de cursos universitarios.

martes, 16 de febrero de 2010

LECTURA PARA NEGOCIACIÓN, FORMADOR DE FORMADORES, COACHING Y SERVICIO AL CLIENTE

La Comunicación Humana se divide en tres grandes áreas:
1- Sintáctica: estudia los problemas relativos a la transmisión de información. En otras palabras a los problemas de codificación, canales, capacidad, ruido, redundancia, etc.

2- Semántica: estudia el significado de lo que comunicamos. Toda información compartida como una conversación implica una gran cantidad de significados posibles.

3- Pragmática: Comunicación y conducta son sinónimos pues toda conducta comunica. Comunicar no es solo el lenguaje verbal sino también todo lo que hacemos y las formas en que nos relacionamos con los otros. Así, desde la perspectiva de la pragmática, toda conducta y no solo el habla, es comunicación. Interesa pues, el efecto de una comunicación sobre el receptor, sino también el efecto que la reacción del receptor tiene sobre el emisor.

Retroalimentación / realimentación:

Cuando un sistema (persona o grupo) ingresa información, sale información y ésta información que sale, vuelve a entrar al sistema como nueva información. La interacción es circular (retroalimentación). En otras palabras busca mantener un equilibrio o una constancia. Al sistema que busca mantener el equilibrio se lo llama HOMEOSTASIS (equilibrio).

Cuando no se puede mantener más el equilibrio, tengo que cambiar la norma, sino se rompe el equilibrio.

Redundancia:

Cuando la comunicación se repite, se establece una pauta. Cuando empezamos a habituarnos a una pauta de repetición, podemos comenzar a predecirla.

En la redundancia contamos con un monto elevado de conocimientos que nos permiten predecir la conducta. (Al tener conocimientos, vamos a poder predecir lo que vendrá, sé qué esperar del otro).

Meta comunicación:

Es la comunicación que habla acerca de la comunicación misma. Es cuestionarse lo que dijo la otra persona. Se refiere a como tengo que entender lo que me están diciendo, como debo interpretar el contenido en función de la relación que tengo con la otra persona.

Axiomas de la Comunicación:

1- La Imposibilidad de no Comunicar: Por mucho que uno lo intente, no puede dejar de comunicar. Actividad o inactividad, palabras o silencio, comunican algo. Por lo tanto, es imposible no comunicarse, ya que debo comunicar que NO quiero comunicar.

2- Los Niveles de Contenido y relaciones de la Comunicación: Una comunicación no solo transmite información sino que al mismo tiempo, impone conductas.

Toda Comunicación significa algo: contenido

Toda Comunicación se establece entre dos partes: por lo tanto se da dentro de una relación.

Mi comunicación con el comunicante me dice como debo entender el contenido de la comunicación, es decir, que para entender el contenido de una comunicación, debo entender la relación de los comunicantes.

3- La Puntuación de la Secuencia de Hechos: Otra característica de la comunicación es la interacción, es decir, el intercambio e mensajes entre los comunicantes.

La falta de acuerdo con respecto a la manera de puntuar la secuencia de hechos es la causa de incontables conflictos en las relaciones. Dejando la comunicación sin reglas claras sobre lo que se desea entender a partir de lo comunicado. En las discusiones es usual que la gente entienda de formas diversas lo que se dijo y ello aumente la tensión de la misma. El problema esta en que las partes no hablan sobre lo que se refieren en sus mensajes, en otras palabras hacer meta comunicación.

4- Comunicación Digital (verbal) y Analógica (no verbal): En toda comunicación humana es posible referirse tanto de forma verbal o con gestos y expresiones. Estos dos tipos de comunicaciones se llaman digitales y analógicos.

La Comunicación Analógica es todo lo que sea comunicación no verbal, pero esto se puede prestar a confusiones ya que solo se limita a movimientos corporales, posturas, miradas, estados de ánimos, entre otros.

La Comunicación Digital son códigos (signos) que le corresponden una significación (todo lo verbal).

Si recordamos que toda comunicación tiene un aspecto de contenido y uno relacional, el aspecto relativo al contenido se transmite de forma digital, mientras que el aspecto relativo a la relación, se transmite de forma analógica.

5- Interacción Simétrica y Complementaria: La relación simétrica y complementaria son relaciones basadas en la igualdad o en la diferencia en relación a los roles de autoridad/poder ejercidos al interior de las relaciones.

En la Simetría, las personas están en igualdad de condiciones y así su interacción puede considerarse simétrica (una relación entre hermanos, compañeros de trabajo).

En la Complementaria, la conducta de uno posee autoridad o poder sobre otro por lo tanto se dice que es complementaria (padre – hijo).

La interacción simétrica se caracteriza por la igualdad, mientras que la interacción complementaria esta basada en las diferencias.

En la relación complementaria ninguno de los participantes impone al otro este tipo de relación, sino que cada uno se comporta de una manera que presupone la conducta del otro.

La Comunicación Patológica o "mala comunicación":

Cada uno de los puntos tratados anteriormente implica ciertas “patologías” de la comunicación.

1. La imposibilidad de no comunicarse: Una situación típica de esta clase es un encuentro entre 2 desconocidos, uno de los cuales quiere entablar una conversación y el otro no: dos pasajeros en un avión que comparten un asiento. Supongamos que A es el que no quiere hablar. Hay 2 cosas que no puede hacer: abandonar el avión y no comunicarse. Hay unas pocas reacciones posibles:

a) Rechazo de la comunicación: Pasajero A puede hacer sentir a B, en forma mas o menos descortés, que no le interesa conversar, lo que implica una situación incomoda.

b) Aceptación de la Comunicación: el pasajero A terminara por ceder y entablar conversación. Una vez que A ha comenzado a responder, le resultara cada vez mas difícil detenerse.

c) Descalificación de la comunicación: A puede defenderse mediante la técnica de la descalificación, puede comunicarse de modo tal que su propia comunicación o la del otro quede invalidada (cambios de tema, oraciones incompletas, ironías y humillación directa)

d) El Síntoma como comunicación: A puede fingir sueño, sordera, borrachera o ignorancia del idioma, o cualquier otra incapacidad que justifique la imposibilidad de comunicarse.

2. La Estructura de niveles de la comunicación (contenido y relación). Se pueden dar las siguientes situaciones:

a) Desacuerdo en el Contenido y Acuerdo en la Relación. Quizás esta sea la forma mas madura de manejar el desacuerdo. (Los participantes acuerdan estar en desacuerdo).

b) Desacuerdo en el Contenido y en la Relación (cuando esta todo mal)

c) Desacuerdo en la Relación y acuerdo en el Contenido (tiene consecuencias nefastas en la comunicación.

El fenómeno del desacuerdo ofrece un buen marco de referencia para estudiar los trastornos de la comunicación debidos a la confusión entre el contenido y la relación. El desacuerdo puede surgir en cualquiera de los dos niveles y ambas formas dependen una de la otra.

Definición de sí mismo y del otro através de la comunicación / relación:

a) Confirmación: B puede aceptar (confirmar) la definición que A da de si mismo. Sin este efecto auto confirmador, no habría motivos para comunicarse. Sin embargo la experiencia demuestra que gran parte de nuestras comunicaciones tienden precisamente a este propósito. La gran gama de emociones que los individuos experimentan entre si (desde el amor al odio), probablemente no existiría y viviríamos en un mundo vació. La persona tiene que comunicarse con los otros con la finalidad de asegurar su autopercepción. La persona es incapaz de mantener su estabilidad emocional durante periodos prolongados en que solo se comunica consigo mismo.

b) Rechazo: La segunda respuesta posible de B, consiste en rechazarla. Sin embargo por penoso que resulte, el rechazo presupone por lo menos un reconocimiento limitado de lo que se rechaza, y por ende no niega necesariamente la imagen que A tiene de si mismo.

c) Desconfirmación: La tercera posibilidad es quizás, la más cruel. Se trata del fenómeno de la desconfirmación que es muy distinto del rechazo de la definición que el otro da de si mismo

No podría haber un castigo más malo que soltar a una persona en una sociedad y hacer que pasara totalmente desapercibido por sus miembros, esta situación llevaría a la perdida de la mismidad. La desconfirmación ya no se refiere a la verdad o falsedad, sino más bien niega la realidad de A como fuente de tal definición. En otras palabras, mientras que el rechazo equivale a: “estas equivocado”, la desconfirmación afirma el hecho: “tu no existes”.

Niveles de Percepción Interpersonal: Hemos visto que la definición que A da de si mismo, puede tener 3 respuestas posibles por parte de B: confirmación, rechazo o desconformación. Estas 3 respuestas tienen un denominador común, ya que por medio de cualquiera de ellas B comunica “Así es como te veo”.

Así, en el discurso a nivel meta comunicacional, hay un mensaje de A a B: “así es como te veo”. Está seguido por un mensaje de B a A: “Así es como te veo”. A este mensaje, A responderá con un mensaje que afirma: “Así es como veo que tu me ves”. Y B a su vez, con el mensaje:”Así es como veo que tu ves que yo te veo”. Se trata de una multiplicidad a infinito de imágenes que creemos tener y creemos que los otros tienen de nosotros.

Imagenes con caracter ilustrativo no propiedad del autor.